UN ENTE OSCURO LLAMADO APOSTOL Y UN PERRO LLAMADO PROFETA MUDO.

¿“Cobertura espiritual”? ¿O estructura de control?

En muchos círculos evangélicos y carismáticos se enseña que cada creyente debe estar “bajo cobertura espiritual”, es decir, sujeto a un apóstol, profeta o pastor que lo guíe, lo cubra y le dé “legalidad espiritual”.

Pero esa idea, aunque suena protectora, en muchos casos se ha convertido en un sistema de dominación jerárquica, más cercano a una pirámide religiosa que al diseño del Reino de Hashem.

¿Quién cubre al apóstol? ¿Es intocable?

Cuando se eleva a un hombre al nivel de “cobertura de todos”, surgen dos grandes peligros:

 1. El apóstol queda sin corrección.

No rinde cuentas a nadie. Entonces, ¿quién juzga sus errores? ¿Quién lo reprende? ¿Quién lo disciplina si cae en manipulación o falsedad?

 2. Se vuelve intocable y casi divino.

Muchos temen tocarlo “porque es el ungido”. Pero esa frase ha sido usada para callar voces, silenciar denuncias y ocultar abusos.

¿De dónde viene esta doctrina de cobertura?

No viene de la Torá, ni del Tanaj. 

En realidad, la “cobertura espiritual” como estructura piramidal proviene de:

 • Sistemas apostólicos modernos (neo-carismáticos).

 • Modelos empresariales disfrazados de iglesia.

 • Ideas de la Tanaj mal aplicadas (como el manto de Elías).

LA VERDADERA COBERTURA ES HASHEM

Hashem es nuestra única cobertura, escudo y torre fuerte.

El Ruaj Hakadosh guía directamente a cada alma.

Los líderes sí pueden servir, aconsejar, enseñar, pero nunca ser “dueños” de la conciencia espiritual de otro.

Conclusión cruda y real

Cuando un hombre se convierte en cobertura de muchos, pero no tiene cobertura sobre él, eso no es un orden espiritual, es una trampa de poder.

Y cuando alguien dice “no toques al ungido” para evitar ser cuestionado, está usando la unción como escudo para el orgullo.

En resumen, 

EL MITO DE LA COBERTURA ESPIRITUAL

Te dijeron que sin un apóstol o profeta no tienes legalidad espiritual.

PERO EL CIELO NO OPERA POR JERARQUÍAS HUMANAS.

Hashem no necesita intermediarios con título.

La verdadera cobertura no impone, protege sin controlar.

ADVERTENCIA:

Cuando un hombre se convierte en tu cobertura total,

estás más cerca del culto que del Reino.

“El Ruaj guía, no domina. Hashem cubre, no encierra.”

Batsheva Jaya Efrat

( Diana Mendiola)

Sobreviviente de una secta